Promueven un hogar de tránsito para víctimas de la violencia familiar; la necesidad de ruptura de algunos paradigmas

Desde el Concejo Deliberante de Puerto Madryn, se propugna avanzar sobre la problemática que implica la violencia familiar, desde uno de los aspectos que mayores dificultades presenta a la hora de su abordaje; el alojamiento temporario para quienes son víctimas de la violencia que se produce en el seno hogareño. En este aspecto, y de acuerdo a una encuesta realizada por el Consejo Nacional de la Mujer, “una de cada tres mujeres son víctimas de violencia familiar”; arrojando que “entre el 80 y el 90 por ciento de los victimarios son cónyuges, concubinos o ex parejas” revela el informe. Es por ello que, desde el año 2005 se espera la respuesta del Instituto Provincial de la Vivienda y Desarrollo Urbano, sobre la sugerencia que el Estado Municipal hiciera en el año 2005; para lograr “una vivienda adecuada para ser utilizada como Hogar de Tránsito para casos de Violencia Familiar”; se destaca de un

proyecto presentado por la ex concejal Nora Rodríguez, mediante resolución 118 de ese año. En este caso, como iniciativa de la edil Andrea Romero, se propone impulsar nuevamente la instauración de este proyecto.

La edil justicialista, Andrea Romero, destaca que “la nueva Carta Orgánica Municipal establece que el municipio promociona y resguarda a las familias como eje de las políticas sociales”; es por ello que se deben “desarrollar programas para prevenir la violencia familiar y asistir a las víctimas” subrayó. En este sentido, destaca que “en nuestra ciudad no existe infraestructura que aloje personas con problemas de violencia familiar”. En este aspecto, “solo se atiende en centros de salud barriales o en el hospital”; desde estos lugares, “son víctimas de estos delitos que sufren lesiones corporales, daños graves de salud física y mental” destacó la concejal; incluso, cuando se llega al extremo de “la muerte misma”; cuestión que alarma por los datos que arrojan las estadísticas.

Daños mayores

Los problemas que produce la violencia hogareña, se analiza en la actualidad por los daños que la misma genera en las personas; específicamente el maltrato infantil dentro del ámbito familiar podría tener como consecuencia, “abandono total del menor y hasta abuso sexual” destaca el argumento de la normativa. Esta situación tiene como efectos nocivos, la posibilidad de conducirlos a patologías de gravedad como “neurosis, psicosis” e, incluso, se han constatado casos de “suicidios, adicción a las drogas y a la delincuencia juvenil y adulta”. La familia “como célula fundamental de la sociedad” es el ámbito donde el niño “debe aprender las normas y valores del medio en que vive”. Según destaca el informe “en las familias donde existe la violencia familiar pueden constituirse en un factor donde surgen conductas delictivas o criminales”. Por otro lado, se destaca que “víctimas directas o indirectas de estos casos se encuentran en riesgo siempre”; por sobre todo, por la necesidad de seguir conviviendo “con los agresores por falta de hogares de tránsito donde se pueda brindar contención, cobijo y también brindar servicios psicológicos y psiquiátricos” muestra como argumento la normativa.

Hogar de tránsito

Según destaca la concejal Romero, “es necesario dotar a Puerto Madryn de la infraestructura necesaria”; mientras la misma, debe acompañar “las acciones que se realizan desde instituciones como la Justicia, la Casa de la Mujer, el Servicio de Protección de Derechos, o desde el ámbito de la Salud Pública”. Según la edil, se puede “gestionar ante el Instituto Provincial de la Vivienda y Desarrollo Urbano; ya que la Municipalidad de Puerto Madryn posee tierras fiscales para la construcción de viviendas” destacó; como así también “mediante distintos programas a través de la Unidad Ejecutora Provincial; podría gestionarse la construcción del hogar de tránsito” indicó la edil.

En este sentido, destaca la impulsora del proyecto, que “la Ordenanza tiene por objeto crear un hogar de tránsito para víctimas de la violencia familiar”. La inquietud, responde además, “al espacio que es solicitado por la Comisaría de la Mujer de nuestra ciudad” como así también por parte de “instituciones vinculadas a la protección de los Derechos Humanos, como el Instituto Nacional Contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo” INADI; subrayó la legisladora.

Sobre estadísticas

La provincia del Chubut, no cuenta con un registro centralizado de casos de violencia familiar. Desde algunos sectores vinculados a la problemática o del fuero judicial, se obtienen datos parciales de la realidad; al contar con especie de registros internos sobre las denuncias que se realizan en este sentido. Sin embargo, estudios que se realizan a nivel nacional, como de otros países, arrojan que en el ámbito familiar, las principales víctimas de la violencia suelen ser los niños y niñas, ancianos y ancianas y las mujeres; concentrándose en forma especial en estas últimas. Estadísticas internacionales muestran que el 75% de actos de violencia cometidos por el cónyuge o la pareja son dirigidos a mujeres. A nivel mundial una de cada diez mujeres es o ha sido agredida por su pareja; mientras que el Concejo Nacional de la Mujer se indica que “una de cada tres” mujeres son víctimas de “actos de violencia familiar”.

El comportamiento violento contra la mujer se manifiesta a través de distintas formas: psicológica, física, sexual y económica. Uno de cada cinco días activos que pierden las mujeres por problemas de salud se debe a la violencia doméstica. Según un informe elaborado por el BID en 1997, del 25% a más del 50% de mujeres latinoamericanas, dependiendo del país donde vivan, sufren algún tipo de violencia en el hogar. También en los países desarrollados  se dan altos índices de violencia contra la mujer. Un informe de Naciones Unidas de 1995 sobre Situación de la Mujer en el Mundo, que únicamente consigna la agresión física recibida por mujeres adultas por sus parejas, muestra que los ataques van de un 17% (Nueva Zelanda) hasta un 28% (EEUU). En el caso de Japón llega al 59%. Solo el 10% de los casos de violencia son ocasionados por enfermedad mental. La mujer tarda de seis a diez años en salir de situaciones de violencia familiar, por factores entre los que se destacan miedo, sentimiento de culpa, desconocimiento de derechos, inseguridad económica, inadecuadas respuestas institucionales.